Nació prematura con un defecto cardíaco congénito y una enfermedad pulmonar crónica
Nada detuvo a Leah Peters una bebé que, a pesar de las complicaciones con las que nació, le ha ganado al coronavirus. La pequeña del Reino Unido tuvo que ser ingresada a emergencias en el Hospital Pilgrim a finales de marzo.
Comenzó con ataques de tos y su ritmo cardiaco era bajo. La bebé sufre de un afectación cardíaca congénita y una enfermedad pulmonar crónica desde su nacimiento de manera prematura en la semana 32. La familia pensaba que solo se trataba de un resfriado común.
Para cuando la llevaron a emergencias los médicos le aplicaron una prueba por los síntomas que presentaba y fue cuando la pesadilla se hizo real. La pequeña dio positivo en COVID-19.
Después de luchar durante unos días en el hospital, la pequeña logró recuperarse poco a poco, sorprendiendo a todos.
“Leah se encuentra entre los más de 130 pacientes diagnosticados con COVID-19 que ya han podido abandonar nuestros hospitales para continuar con sus recuperaciones”, informó el subdirector ejecutivo del NHS Trust de United Lincolnshire Hospital.
El ejecutivo explica que este caso sirve para levantar el ánimo de todos los colaboradores del hospital, pues esto se debe al buen trabajo que están realizando. Los padres de Leah agradecen a los doctores que ayudaron a la recuperación de la bebé.
Casos como el de Leah nos muestran que la esperanza es lo último que muere. Comparte esta gran guerrera para que nos ayude también a levantar el ánimo.
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